Esta boda fue un milagro en cuanto al clima se refiere. El día anterior llovió a cántaros en Tarragona, fue apoteósico y al día siguiente amanecimos con un día semi nublado pero que fue abriéndose poco a poco, de tal manera que pudimos celebrar toda la boda de principio a fin como habíamos planeado:)

Una boda llena de alegría y gente muy joven con ganas de marcha, la entrada épica de los novios a la ceremonia en vespa y toda la boda en global fue un festival de alegría.

La decoración floral a cargo de Anna Bella Floristes y las fotos de alkolor fueron testigos de este gran día.